Este jueves, la Policía Nacional de Honduras informó sobre la detención de un ciudadano costarricense durante una operación en un concurrido barrio de Tegucigalpa, la capital del país. El arrestado, un hombre de 49 años llamado Roy Monge, es objeto de una alerta roja internacional por delitos graves como estafa, falsificación de documentos públicos y auténticos, falsedad ideológica y uso fraudulento de documentos en Costa Rica, según un informe de la policía hondureña.
Foto: laprensahn
Monge, originario de San José, fue aprehendido por agentes de la Unidad Investigativa Contra Delitos Informáticos (UICDI) de Interpol en un barrio de Tegucigalpa. El costarricense había ingresado a Honduras con una identidad falsa y ya había sido arrestado en 2020, 2022 y 2023 por clonación de tarjetas bancarias en la capital y en La Ceiba, en el centro y el Caribe del país, según la policía hondureña.
Las investigaciones revelan que Monge utilizaba su habilidad en tecnología para obtener información confidencial de las tarjetas bancarias de sus víctimas en varios países de la región. Además, obtenía datos bancarios de sus víctimas mediante suplantación de identidad o “phishing” y luego realizaba compras ilegales o transferencias de dinero a sus cuentas, según la policía hondureña.
Monge es especialmente experto en tecnología y posee conocimientos avanzados en seguridad informática, lo que le permitía eludir los sistemas de detección de fraude y actuar sin despertar sospechas, explicó la misma fuente.
La detención de Monge es un “paso significativo en la lucha contra estos delitos, ya que contribuirá a desmantelar redes criminales y resultará en una disminución en los casos de clonación de tarjetas bancarias”, subrayó la policía hondureña.
Finalmente, Monge fue trasladado a una unidad de Interpol en Honduras para iniciar los procedimientos de expulsión del país y entregarlo a las autoridades de Costa Rica.