La coronación de Carolina Shiino como Miss Japón 2024 ha desencadenado un intenso debate sobre la identidad, tal como informa la BBC. Shiino, una joven de 26 años, llegó a Japón a la edad de cinco años, creció en Nagoya y en 2020 adquirió la ciudadanía japonesa por naturalización, lo que implicó renunciar a su ciudadanía ucraniana de nacimiento, de acuerdo con las leyes japonesas.
(BBC NEWS)
Esto le permitió participar en el II certamen Miss Japan Contest, un concurso que admite a todas las mujeres solteras de entre 17 y 26 años que posean la nacionalidad japonesa. Tras su nombramiento, algunos usuarios de las redes sociales cuestionaron su identidad japonesa, mientras que otros calificaron la elección como “discriminación” hacia las demás concursantes, dado que la ganadora no tiene ascendencia japonesa.
Shiino fue seleccionada por un jurado de 30 jueces que evaluaron la “belleza japonesa” de las 12 finalistas, considerando tres aspectos: interno, físico y de conducta.
Por otro lado, también hubo usuarios que defendieron la elección: “¿Qué hay de malo en que una persona japonesa sea elegida Miss Japón?” o “Hay muchos japoneses que no valoran Japón, así que, ¿qué hay de malo en que alguien que ha vivido en el país desde su infancia, se haya naturalizado y aceptado el desafío de ganar Miss Japón como japonesa?”.
Algunos aprovecharon la oportunidad para recordar el caso de Ariana Miyamoto, quien ganó la edición de 2015 de Miss Universe Japón y generó un debate similar. Miyamoto, hija de madre japonesa y padre afroamericano, causó tanto admiración como controversia por su origen mixto y fue objeto de numerosas críticas.