El abogado Raymond Colon afirmó al concluir la novena jornada de interrogatorios que Juan Orlando Hernández (JOH) se presentará como testigo en el juicio, asumiendo así un papel decisivo en su defensa, marcando este movimiento como su última estrategia.
Raymond Colon hizo esta declaración tras la captura de uno de los dos individuos responsables del asesinato de una empleada de gasolinera en Campamento, Olancho, un hecho ocurrido el viernes 1 de marzo, según información brindada por la Policía Nacional de Honduras.
En relación con el testimonio, Fabio Lobo, el hijo del expresidente Porfirio Lobo Sosa, quien también es abogado, fue condenado a 24 años de prisión en Estados Unidos por narcotráfico.
Lobo afirmó haber pagado sobornos por un total de 450,000 dólares para la campaña presidencial de Juan Orlando Hernández en las elecciones de 2013.
Fabio Lobo, siendo el primogénito de Porfirio Lobo Sosa, gozaba de privilegios gubernamentales durante el mandato de su padre. Sin embargo, su vida tomó un rumbo diferente cuando se involucró con el narcotráfico, específicamente con Los Cachiros, tras intentar explotar una mina en Colón.
El hijo de Lobo Sosa expresó que creía que su padre desconocía sus tratos con traficantes, mientras afirmaba que Juan Orlando Hernández estaba al tanto y manipulaba a su padre. Fabio colaboró con la DEA y fue arrestado en 2015 durante un intento de negocios de drogas en Haití, siendo posteriormente trasladado a Estados Unidos.
El testimonio de Fabio Lobo ha sido crucial en el juicio contra Juan Orlando Hernández, implicando al expresidente hondureño en vínculos con narcotraficantes y financiamiento ilícito para su campaña.
La defensa de Hernández presentará al expresidente como testigo, jugando así su última carta, ya que los testimonios anteriores de narcotraficantes han dejado una imagen negativa ante el jurado.