Foto: BBC
Una herramienta de inteligencia artificial (IA) utilizada en hospitales británicos ha demostrado su eficacia al identificar signos tempranos de cáncer de seno que habían pasado desapercibidos en las revisiones de los médicos. Esta herramienta, conocida como Mia, ha sido sometida a pruebas en varios centros de salud en el Reino Unido, analizando cerca de 10.000 mamografías.
Aunque la mayoría de estas mamografías no mostraban signos de cáncer, Mia logró identificar con éxito los casos que sí los presentaban, incluyendo 11 pacientes cuyos cánceres no habían sido diagnosticados por los médicos.
En sus etapas iniciales, los cánceres de seno pueden ser extremadamente pequeños y difíciles de detectar. La BBC tuvo la oportunidad de presenciar cómo Mia señalaba tumores prácticamente invisibles al ojo humano durante su prueba en el hospital Grampian. Este tipo de tumores pueden crecer y propagarse rápidamente, dependiendo de su composición.
Bárbara fue una de las pacientes cuyo diagnóstico fue realizado gracias a la observación de la herramienta Mia./BBC
Uno de los casos destacados es el de Bárbara, cuyo cáncer fue identificado por Mia aunque no había sido detectado por los médicos que revisaron sus imágenes. Gracias a esta detección temprana, el tumor de Bárbara, de apenas 6 mm, pudo ser tratado con éxito con una operación y radioterapia, lo que mejoró significativamente sus posibilidades de supervivencia.
El uso de herramientas de IA como Mia también ofrece la posibilidad de reducir el tiempo de espera para los resultados de los pacientes, pasando de 14 días a solo 3, según Kheiron Medical, la compañía desarrolladora de la herramienta. Actualmente, cada estudio por imágenes es revisado por dos radiólogos, pero se espera que herramientas como Mia puedan eventualmente reemplazar esta práctica, mejorando así la efectividad del proceso de revisión.
Sin embargo, Mia no es perfecta. No tiene acceso al historial médico de los pacientes, lo que puede limitar su capacidad para identificar quistes previamente diagnosticados como benignos. Además, durante el ensayo clínico, el elemento de aprendizaje automático de Mia estuvo desactivado debido a regulaciones sanitarias, lo que significa que no pudo aprender de manera continua durante su uso.
A pesar de estas limitaciones, los resultados del ensayo clínico son prometedores y han sido validados de forma independiente por la Universidad de Aberdeen. El Colegio de Radiólogos del Reino Unido reconoce el potencial de esta tecnología para mejorar el diagnóstico y la atención al paciente.
Julie Sharp, del Centro de Investigación del Cáncer de Reino Unido, subraya la importancia de la innovación tecnológica para mejorar la atención médica y aliviar la presión sobre el personal de salud en un momento en que se diagnostican cada vez más casos de cáncer.
Se están llevando a cabo otros ensayos clínicos relacionados con la inteligencia artificial en la atención sanitaria en el Reino Unido, lo que destaca el interés y la importancia crecientes de esta tecnología en el campo médico.