La Fiscalía ha expresado su desacuerdo con las solicitudes presentadas por Juan Orlando Hernández y Mauricio Hernández Pineda, quienes intentaban dividir su juicio conjunto por cargos de narcotráfico. En respuesta a estas solicitudes, la Fiscalía del Distrito Sur de Nueva York ha presentado una objeción ante el juez Kevin Castel.
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Ambos, junto con el exdirector de la Policía Nacional, Juan Carlos ‘El Tigre’ Bonilla, están programados para comenzar su juicio el 12 de febrero de 2024. Hernández y Pineda argumentaron que Bonilla tenía la intención de testificar durante el juicio que estaba investigando actividades de narcotráfico en Honduras, incluyendo a sus coacusados, y que presentaría pruebas que supuestamente los incriminarían.
No obstante, la Fiscalía argumentó que los acusados no lograron demostrar que un juicio conjunto les causaría perjuicio, ni afectaría sus condenas como resultado de un error judicial. Según la carta del Gobierno de Estados Unidos, incluso si un jurado aceptara la defensa de Bonilla, no estaría obligado a condenar a Pineda y Hernández por los delitos imputados en este caso. Por lo tanto, el Tribunal debería rechazar sus solicitudes de indemnización adicional.
Juan Orlando Hernández fue extraditado a Estados Unidos el 22 de abril de 2022, donde enfrenta juicio por tres delitos: conspiración para la importación de cocaína, posesión de ametralladoras y armas pesadas y conspiración para la posesión de dicho armamento. Podría enfrentarse a cadena perpetua en caso de ser hallado culpable. El 10 de mayo de 2022, se declaró no culpable en un tribunal federal de Nueva York de los cargos que le imputa el Gobierno de Estados Unidos.
Por su parte, Mauricio Hernández se entregó voluntariamente a la justicia para responder a la acusación. Viajó a Guatemala y se entregó a los agentes de la DEA en un aeropuerto de esa nación. Según la documentación oficial, el arresto de Hernández Pineda se registró alrededor de las 5:45 PM del 12 de febrero de 2020.
Finalmente, “El Tigre” Bonilla fue detenido el 9 de marzo en una estación de peaje en el sector de Zambrano, a unos 30 kilómetros al norte de Tegucigalpa. Su extradición tuvo lugar el 10 de marzo de 2022.
