Eligio ‘Eli’ Regalado, un líder religioso de una congregación cristiana en Denver, y su esposa Kaitlyn, desarrollaron y comercializaron una criptomoneda llamada “INDXcoin”, siguiendo las directrices “que Dios le proporcionó en un sueño”. Actualmente, las autoridades los acusan de estafa por recaudar más de tres millones de dólares.
Foto: HCH
Tung Chan, la Comisionada de Valores de Colorado, presentó acusaciones de fraude civil contra los Regalado y las empresas INDXcoin, LLC, Kingdom Wealth Exchange LLC y otros por “presuntas infracciones de las disposiciones contra el fraude, de licencias y de registro de la Ley de Valores de Colorado”, según un comunicado emitido por la agencia el 18 de enero.
De acuerdo con la demanda interpuesta por la oficina del Fiscal General de Colorado, los investigadores de la División de Valores de Colorado descubrieron que, desde junio de 2022 hasta abril de 2023, “INDXcoin recaudó casi 3.2 millones de dólares de más de 300 individuos”.
En la denuncia se indica que Eli Regalado se acercó a las comunidades cristianas de Denver y afirmó que “Dios le indicó directamente que los inversores se enriquecerían si invertían en INDXcoin”.
Según las autoridades, los Regalado no tenían experiencia en criptomonedas, lo que quedó evidenciado cuando un informe de un auditor externo describió su código INDXcoin como “inseguro y lleno de serios problemas técnicos”.
A pesar de ese informe, los Regalados supuestamente continuaron promoviendo INDXcoin como una inversión de bajo riesgo y altos rendimientos, pero en realidad INDXcoin no tenía liquidez y prácticamente no tenía valor.
¿Qué argumenta el pastor en su defensa? Después de que se diera a conocer la acusación de fraude, el pastor publicó un video en el sitio web de su empresa de criptomonedas INDXcoin, asegurando que no era él quien hablaba, sino “que Dios hablaría a través de él para explicar la situación”.
En su mensaje, Regalado confirmó que él y su esposa obtuvieron 1.3 millones de dólares con la venta de la criptomoneda, de los cuales gastaron “unos cientos de miles de dólares” en “una remodelación de la casa que el Señor nos indicó que hiciéramos”.
El hombre también confirmó que carecía de experiencia en el sector de las criptomonedas y que, en una de sus conversaciones con Dios, le expresó su preocupación por no saber cómo manejar el negocio.